Si tiene sobras de salsa de arándano o quiere seguir adelante y mantener un caldo de esa deliciosa salsa en el congelador, ¡puede hacerlo! La salsa de arándanos es fácil de congelar. He aquí cómo hacerlo:
1 Asegúrate de que la salsa de arándanos se haya enfriado por completo antes de congelarla.
2 Divida la salsa en porciones. Vierta la salsa en recipientes aptos para congelador. Una porción por envase. Puede usar bolsas para congelar si lo prefiere, pero asegúrese de ponerlas en el congelador con cuidado para que no se rompan. También debes dejar un espacio en la parte superior de las bolsas para permitir que la salsa de arándanos se expanda con el frío.
3 Selle cuidadosamente las bolsas o contenedores, luego etiquételos con la fecha y el contenido.
4 Coloca las bolsas o envases en el congelador y congélalos por un máximo de 2 meses.
¿Cuál es la vida útil de una salsa de arándanos en el congelador?
Cuando se almacena en las condiciones adecuadas, una salsa de arándanos conserva una calidad óptima durante aproximadamente 1 a 2 meses en el congelador, pero sigue siendo segura para consumir más allá de este período.